En un comienzo de año marcado por la suba de la hacienda, los frigoríficos exportadores no
acompañan la tendencia. En este momento, el novillo argentino es el más caro de la región
y eso perjudica los negocios.
En el Mercado Agroganadero de Cañuelas (MAG) se adelantó la recomposición de precios
de la hacienda.
Pero este panorama no es parejo para toda la cadena de ganados y carnes: el eslabón
exportador no está pudiendo acompañar la tendencia y podría ponerle un techo a estas
subas, según un informe elaborado por la consultora AZ Group para la Asociación Argentina
de Angus.
A partir de la reducción de la hacienda liviana en los corrales, las cotizaciones de novillitos y
vaquillonas se dispararon y superaron máximos de $3.000, en el caso de lotes de muy
buena terminación y buen rinde al gancho garantizado.
“Los novillos no acompañaron en el ritmo, más allá de Cañuelas, el poder de compra de la
exportación está debilitado por los altos costos en dólares que presenta la hacienda
argentina.”, señaló el analista ganadero Diego Ponti, de AZ Group.
En ese contexto, la vaca cotizó estable y China -en plena celebración de Año Nuevo Lunar-
redujo su intensidad e interés en las compras.
Un dato que remarcó el informe fue que el novillo argentino se posiciona como el más caro
de la región, con un kilo que cotiza U$S 4,3. En Estados Unidos, su precio llega a los U$S
6,9.
“La pérdida de competitividad de la industria exportadora será un límite para el crecimiento
de precios de la categoría”, remarcó el analista.
Además, explicó que si bien los precios internacionales no son malos, resultan insuficientes
versus los costos locales.
“Se esperan mejoras para la exportación en la zafra, por oferta concentrada de vacas, que
este año será menor por la elevada faena 2024 y por mayor preñez en la primavera
pasada”, agregó.