Según la Bolsa de Rosario, el actual margen del poroto es de US$ 223,8 dólares por hectárea, un
20% menos con respecto a la campaña anterior. Preocupante también para el Gobierno: la mejora
productiva no se traducirá en más ingreso de dólares
Mientras avanza la siembra de soja y las dudas climáticas comenzaron a despejarse, los
productores miran de reojo los precios.
En las pizarras de Chicago, las cotizaciones del poroto han caído -según estimó la Bolsa de
Comercio de Rosario (BCR) en los niveles más bajos desde 2020.
En este contexto, la entidad calculó que la cotización en dólares cayó a U$S 260 por tonelada. Este
precio se ubica un 7% por detrás del valor promedio en la actual campaña 2023/24 y en el nivel
más bajo desde el ciclo 2018/19.
Por el lado de las proyecciones de cosecha, se espera que la soja 2024/25 llegue a las 53,1 millones
de toneladas, el volumen más elevado de los últimos seis años.
Si bien la la suba en el volumen de producción no llega a compensar la caída de precios, la
diferencia con el año anterior es menor a los U$S 100 millones cuando se comparan los valores de
la producción en ambas campañas.
En la 2023/24 fue de U$S 13.875 millones y con estos precios, en el actual ciclo sería de U$S
13.786 millones.
“Prácticamente duplica el resultado de la 2022/23, ciclo afectado por la peor sequía de los últimos
60 años”, agregaron desde la BCR.
En el informe, compararon estos números con los ciclos 20/21 y 21/22. El dato a tener en cuenta
es que si bien en esos años la producción fue menor a 53 millones de toneladas, los precios
internacionales de los granos habían tocado niveles récord.
En esos años, hubo dos factores de peso para explicar la disparada de precios: la disrupción en las
cadenas globales de suministro –por la pandemia de coronavirus– y la guerra entre Rusia y
Ucrania, proveedores claves del mercado global de granos y subproductos.