Proyectan 2,6 Mha de girasol para la campaña 2025/26, la segunda mayor en dos décadas.
Así lo indicaron desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Con el comienzo de los relevamientos de intención de siembra, la Bolsa de Cereales estima
que el área destinada al girasol para la campaña 2025/2026 alcanzará los 2,6 millones de
hectáreas. Este número representa un incremento del 18,2 % en comparación con el ciclo
previo y supera en un 30 % el promedio de los últimos cinco años. De concretarse, sería la
segunda mayor superficie sembrada desde que se inició la serie del Panorama Agrícola
Semanal (PAS), señal de un claro resurgimiento del cultivo, que venía perdiendo terreno en
ciclos anteriores.
Entre los factores que explican este crecimiento se destaca el renovado interés por sembrar
en el NEA y el centro-norte de Santa Fe, regiones históricas para el girasol que habían
reducido su participación desde la campaña 2018/19, principalmente por la falta de
humedad durante el período óptimo de implantación. En esta ocasión, los buenos
rendimientos del último ciclo y la recuperación de los perfiles hídricos durante el invierno
reactivaron las decisiones de siembra.
También se observa una consolidación del cultivo en zonas como Córdoba y San Luis,
donde el girasol demostró ser una opción viable durante años secos por su resistencia a
condiciones climáticas adversas. Si bien la mejora en la disponibilidad de agua podría llevar
a algunos productores a volver a cultivos más rentables, se estima que el área girasolera se
mantendrá estable respecto al ciclo anterior.
En el sur de la región agrícola, especialmente en Buenos Aires y La Pampa, el panorama es
más incierto. En estos territorios, donde la siembra comienza más tarde, podrían
aprovecharse lotes que no se sembraron con trigo debido al exceso de lluvias. Esta
situación abre una posibilidad para que el girasol gane espacio, aunque la definición
dependerá del comportamiento del clima y del contexto económico durante las próximas
semanas.