Según un informe de la Bolsa de Rosario, la soja, el maíz y el trigo en las pizarras de Chicago se halla en los valores más bajos desde 2020.
La soja sigue su carrera descendente en Chicago, a partir de la presión bajista que generan el clima favorable en los cultivos de soja y maíz en Estados Unidos.
Esto genera preocupación en el negocio del campo: de acuerdo a un relevamiento de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), los contratos que se negocian en ese mercado retrocedieron al piso mínimo de 2020.
“La tendencia bajista se ha reafirmado luego del intervalo del mes de mayo, y las cotizaciones de los commodities sobre el mercado a término norteamericano cedieron frente a un escenario global de oferta abundante y una reorientación de la demanda China hacia el hemisferio sur”, remarcaron.
En un escenario que espera una oferta abundante de granos, junto a un ritmo lento de ventas, hizo que los fondos especulativos amplien su posición vendedora en el mercado, apostando a una caída en las cotizaciones.
De hecho, los fondos de inversión registran el segundo mayor volumen de la historia en futuros vendidos para el conjunto de commodities agro.
Con estos antecedentes, la semana empezó a cerrar con una cotización de U$S 373,5 por tonelada en soja, con una caída en entre enero y julio de este año acumuló un 22%. “No se observaba un valor nominal tan bajo para la oleaginosa desde septiembre de 2020”, advirtieron.
El poroto no fue el único cultivo en alcanzar un nuevo piso en Chicago. El contrato más negociado de maíz cotizó a US$ 156,9/t, el menor valor nominal registrado desde noviembre de 2020. Con estos números, acumula una caída del 15% en lo que va del año.
Como si esto fuera poco, el futuro de mayor volumen operado de trigo cerró a un precio de ajuste de US$ 192,4/t. El cereal tocó un mínimo desde agosto de 2020, en medio de la presión de la cosecha en curso en el hemisferio norte.
Con este derrotero de precios, el poder de compra de compra de los granos se desplomó. En el caso del maíz llegó a ser más bajo que enero de 2000, en trigo se asemeja al período 2016-2019 y en soja tiene el mismo poder adquisitivo que durante enero del año 2020.