La molienda de soja a nivel global ha comenzado a mostrar signos de recuperación en los últimos meses. Este repunte se atribuye a una mayor demanda de harina y aceite de soja, a la vez que otros commodities han cedido protagonismo. Las proyecciones para el período mayo/agosto de 2023 sugieren que la molienda mundial podría alcanzar los 113,5 millones de toneladas, superando las cifras registradas el año pasado.
En este escenario, China emerge como un factor determinante en el dinamismo del crush, experimentando un aumento interanual de 4,54 toneladas. Paralelamente, países como Brasil contribuyen al repunte con incrementos proyectados para el período mayo/agosto de 2023. No obstante, Argentina enfrenta una reducción estimada de 4,29 Mt en su producción de harina de soja, aunque esta merma sería en parte compensada por el aumento en otros países, especialmente China.
En términos comerciales, la fortaleza de los precios de la harina de soja hasta abril/mayo de 2023 se atribuye al recorte en las exportaciones de Argentina, que está siendo contrarrestado parcialmente por una mayor demanda de exportación en Estados Unidos, Brasil, India y China. La previsión de una recuperación en el procesamiento de soja a nivel mundial en los próximos meses podría mitigar los efectos de las limitadas exportaciones argentinas en un contexto de demanda relativamente más débil.