En los cinco meses que van desde principios de noviembre pasado hasta fines de marzo, el índice
de Insumos Ganaderos ha subido un 99%, mientras que el precio del novillo se incrementó un
104% y el IPC creció un 112%.
Las cotizaciones de la hacienda se mantuvieron en términos reales en noviembre-enero, pero
luego han sido superadas por el desborde inflacionario.
Un índice de Insumos Ganaderos ponderado (que incluye el costo de personal, praderas, verdeos,
maíz, silo de maíz, rollo, alambre, silaje de maíz y gasoil) subió un 84% en noviembre-diciembre,
pero en enero se incrementó un 5,3%, en febrero un 1,8% y en marzo sólo un 1,1%.
La quietud del dólar, que limita el poder de compra de la exportación, tiene un efecto también
sobre los insumos ganaderos, que en los últimos tres meses están creciendo bien por debajo de la
inflación. En marzo subió el costo del personal y del gasoil, pero cayó el costo de una pradera, del
maíz, del silaje y del alambre.